Las nuevas Tecnologías de la Información y de la Comunicación han evolucionado en los últimos años, debido a su capacidad de interconexión a través de la Red. Esta nueva fase de desarrollo va a tener gran impacto en la organización de la enseñanza y el proceso de aprendizaje. La acomodación del entorno educativo a este nuevo potencial y la adecuada utilización didáctica del mismo supone un reto sin precedentes.
Un primer acercamiento a la definición de comunicación puede realizarse desde su etimología. La palabra
deriva del latín communicare, que significa “compartir algo, poner
en común”. Por lo tanto, la comunicación es
un fenómeno inherente a la relación que los seres vivos mantienen cuando se
encuentran en grupo. A través de la comunicación, las personas o animales
obtienen información respecto a su entorno y pueden compartirla con el resto.
El proceso comunicativo implica
la emisión de señales (sonidos,
gestos, señas, etc.) con la intención de dar a conocer un mensaje. Para que la comunicación sea
exitosa, el receptor debe
contar con las habilidades que le permitan decodificar el mensaje e interpretarlo. El proceso luego se
revierte cuando el receptor responde y se transforma en emisor (con lo que el
emisor original pasa a ser el receptor del acto comunicativo).
En el caso de los seres humanos, la comunicación es un acto propio de la actividad
psíquica, que deriva del pensamiento, el lenguaje y del
desarrollo de las capacidades psicosociales de relación. El intercambio de
mensajes (que puede ser verbal o no verbal) permite al individuo
influir en los demás y a su vez ser influido.
Entre los elementos que pueden distinguirse en el proceso comunicativo, se
encuentra el código (un sistema de signos y reglas que se combinan
con la intención de dar a conocer algo), el canal (el medio físico a
través del cual se transmite la información), el emisor (quien desea
enviar el mensaje) y el receptor (a quien va dirigido).
La comunicación puede ser afectada por lo que se denomina como ruido,
una perturbación que dificulta el normal desarrollo de la señal en el proceso
(por ejemplo, distorsiones en el sonido, la afonía del hablante, la ortografía
defectuosa).
La comunicación es un elemento básico de la sociedad en general. El proceso
comunicativo está constituido por una multitud de elementos, materiales y
humanos, acorde con el nivel de estructuración de la sociedad de la que
formamos parte.
La Comunicación satisface tres necesidades básicas del ser humano:
- Informar o informarse,
- Agruparse para conseguir metas comunes, y
- Establecer relaciones interpersonales.
Quienes se comunican, aspiran a conseguir la satisfacción de las
necesidades que les impulsaron a comunicarse.